sábado, 23 de noviembre de 2013

La pérdida del "seny" catalán


Para quién no lo entienda (que supongo que serán pocos), el vocablo catalán "seny", que se podría traducir por sensatez o cordura,  está relacionado con la capacidad mental que predispone a una justa percepción, apreciación, comprensión y actuación ante situaciones determinadas. El "seny" es un concepto que ha ido unido a la  sociedad catalana.

Hubo una época, una época reciente y larga, que en el resto de España se manifestaba un sentimiento de admiración por la forma de ser de los catalanes y su capacidad de enfrentarse al futuro. Pueblo trabajador, con "seny" poco amigo de aventuras irrealizables. Abierto al mundo, puerta de Europa, precursor e impulsor de nuevos modelos culturales...  Pero llegó el nacionalismo. Seguramente ya estaba, pero salió a la luz. El nacionalismo se vistió primero de atractivo e indefenso gatito juguetón, pero fue desarrollando calladamente la fiera que llevaba dentro. Y salió la fiera.
La defensa por los derechos de la lengua local se transmutó en la imposición de la misma. Se tomaron  los modelos de regímenes  autoritarios y se privaron de los derechos lingüísticos a una parte substancial de los ciudadanos catalanes.
La siguiente etapa fue, y es, la construcción de una realidad ficticia. El intento de creación de un estado Catalán que no ha existido nunca. La llamada a un derecho a decidir sobre algo sobre lo que no se tiene derecho a decidir. Los dirigentes políticos se han empeñado en demostrar que lo del "seny" era un tópico o al menos que no está tan extendido como parecía.

Una prueba de la pérdida de ese "seny" la tuvimos en las  declaraciones del presidente de ERC, Oriol Junqueras, que decía, según cita textual de La Vanguardia de 13 de noviembre "Si hemos sacado dos millones de personas a la calle... ¿Quién dice que no podríamos parar la economía catalana durante una semana?"..."Los efectos de un parón en la economía catalana se notarían en el conjunto del Estado"..."¿Qué impacto tiene sobre el PIB español?"... "¿Y que pasa con la prima de riesgo española?.
De salida como demócrata y liberal me entristece pensar que alguién crea que tiene la capacidad de "sacar" dos millones de personas a la calle. Me preocupa que un gran número de mis paisanos sean para los políticos solo eso, un número para ser "sacado" cuando las circunstancias lo aconsejan. Tengo un mejor concepto de las personas con las que convivo. Espero no equivocarme.
Esa capacidad de "sacar" personas a discreción me recuerda viejos regímenes de ingrato recuerdo.

La segunda parte de la frase ha sido más comentada. La idea es simple: Parar la economía catalana durante una semana para hacer daño a la economía española. El "seny" entra ya en las profundidades abismales. Con tal de hacer daño a la economía española el Sr. Junqueras planteaba hacer el harakiri a la economía catalana. Y seguramente él estaba convencido que sería capaz de hacerlo. Igual que dice que pueden "sacar" dos millones de personas a la calle , cree que pueden parar una economía de más de 7,5 millones de personas. Con tal de hacer un daño a España  haría 5 veces más daño a Cataluña (1:5 es la relación aproximada de los PIB de Cataluña y España).
Lo sorprendente es que la sociedad catalana, la del "seny", ha reaccionado solo tímidamenente a tamaño despropósito e insensatez. Han habido voces claras desde Cs y PP, con sordina desde CiU y velados aplausos desde ERC.

Que la pérdida del "seny" se está generalizando lo comprobamos cuando leemos los resultados del Barómetro de noviembre del Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalitat. Resulta que el político más valorado en Cataluña es Oriol Junqueras (el de la semana de huelga) con una valoración del 5,61. El segundo más valorado es Alfred Bosch, también de ERC con 5,21  y la gran noticia llega cuando el tercer político más valorado en Cataluña es David Fernández con 5.07. David, para quien no lo conozca (que supongo que serán muchos) es el Diputado que amenazó a Rato con un "sandaliazo", equiparando el Parlament a las ruedas de prensa de Afganistán.

Esto es lo que hay. Para bien y para mal. El nacionalismo ha hecho entrar en barrena a la sociedad catalana. La evolución económica de los últimos 30 años lo deja claro, pero también es capaz de hacer perder señas de identidad que todos reconocimos como muy positivas en el pueblo catalán.
A pasos agigantados se está perdiendo el "seny" catalán. Esperemos que sea recuperable.

Bibliografía

1.- La Vanguardia 13/11/2013


6 comentarios:

  1. porque estamos hartos de esta España..torera de mantilla,crucifijo,atrasada..,la paciencia se acaba..el seny lo guardamos para cuando seamos independientes.

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    1. Y el resto de España esta hasta las mismísimas de cuatro desustanciados como tu, si no te gusta Cataluña , que es España, pues ya sabes a cascala y si no te vas a otro sitio, Cataluña siempre ha estado donde esta, y nadie lo va a cambiar enterau por muchas roncas que eches.

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    2. Mejor que la mantilla La moreneta cagando, estais fatal nano

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  2. El seny catalán estaba muy bien cuando en la épcoca franquista Cataluña estaba a la cabeza de España en economía. Todos somos educados, sab emos estar, amables y señores caundo el agua va por el surco que a nosotros nos conviene. Basta que el surco se tuerza o el agua la deriven hacia otro, para perder todas esas cualidades. Soy pues de la opinión de que el seny catalán no ya es un tópico, sino un dicho como cualquier otro referido a cualquier otra región de España, e incluso del mundo. Hay un dicho que dice que cuando el hambre entra por la puerta, el amor sale por la ventana. Eso es lo que le ha ocurrido al dichoso seny catalán; en donde hubo fuego quedan rescoldos, si estos no los hay es porque fuego tampoco.

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  3. Dos pequeños detalle: El Sr. Fernández mostró su sandalia al Sr. Rato en una comisión del Parlament, no en el seno del Parlament.

    La famosa sandalia lanzada a Bush en una rueda de prensa fué en Irak, no en Afganistán.

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